¿PENSASTE ALGUNA VEZ EN TODO LO QUE LE DEBEMOS A NUESTRAS RODILLAS?

Seguramente solamente te acordás de ellas cuando te duelen… ¿no es así?

Gracias a nuestras rodillas, en combinación con las articulaciones de la cadera y la columna vertebral nos diferenciamos de los animales que andan en cuatro patas.

Las rodillas figuran en el lenguaje cotidiano simbólico: “se puso de rodillas” puede significar que “ha cedido su poder o su Ego ante algo que considera superior o más fuerte que uno” Por ejemplo, para rezar, para rogar algo a alguien, para pedir clemencia. Podemos arrodillarnos frente a algo que consideramos valioso y superior a nosotros como signo de respeto, o como expresión de darnos por vencidos y doblegarnos frente a algo o a alguien.

Desde la Biodecodificación, las rodillas representan la etapa de la adolescencia. El ser humano asciende desde sus pies (que representan la niñez y la relación con la madre) para llegar finalmente a sostenerse sobre sus caderas (que simbolizan la etapa adulta).

Pasamos del GATEO a la caminata. Para gatear correctamente es necesario sostenerse sobre las manos y las rodillas. Muchos niños que no logran gatear y pasan directamente a la posición erecta, pueden perder la oportunidad de sincronizar adecuadamente el movimiento de sus miembros superiores con los inferiores. El gateo es una etapa muy importante para el desarrollo de la propiocepción y la coordinación motriz. Así que … ¡a no apurar a los niños a pararse antes de tiempo!

Nos agachamos para protegernos: nos “achicamos”.
Nos ponemos de pie para defendernos y decir “AQUÍ ESTOY”: nos “agrandamos”.

Cuando estamos sentados y nos ponemos de pie nuestras rodillas ejecutan un maravilloso movimiento cuyo mecanismo ha sido imitado por el hombre para sus maquinarias.

(Imagen extraída de Stanford Medicine Children’s health)

Las rodillas son una de las articulaciones mas fascinantes que tiene nuestro cuerpo y de las más grandes junto con las de la cadera.

Los huesos duros, fémur y tibia (los más grandes de nuestro cuerpo) se deslizan fácilmente entre sí sin rozarse gracias a los cartílagos que les hacen de almohadilla y al líquido sinovial que los lubrica.

Las rodillas solo tienen 2 movimientos básicos:FLEXIÓN y EXTENSIÓN.

Para que esta estabilidad de movimiento se mantenga, existen los famosos LIGAMENTOS (tantas veces causa de lesión y dolor). Los hay rectos y cruzados. Estos ligamentos se insertan en las partes cartilaginosas y óseas y las unen entre sí en forma dinámica, impidiendo movimientos que desarmen la articulación. En síntesis, una perfecta obra de ingeniería corporal.

¿CUÁNDO SE LESIONA LA RODILLA?

  • Cuando la forzamos a hacer un movimiento que no está en su programación, por ejemplo una torsión o una flexión lateral. Esto es muy común en fútbol y deportes de frenado y cambio súbito de dirección como el básquet.

  • Cuando forzamos exageradamente sus movimientos naturales: una hiper flexión (por ejemplo en senderismo al subir rocas mas altas que nuestra pantorrilla) o una hiperextensión (por ejemplo en bailarines clásicos)

Hace mas de 15 años, haciendo senderismo por el Parque Nacional Nahuel Huapi con una mochila de 17 kg sobre mi espalda, crucé un arroyito sobre un puente de troncos improvisado. Un tronco se quebró, mis piernas reaccionaron para impedir la irremediable caída, pero lamentablemente mi rodilla izquierda hizo un movimiento brusco lateral, con lo que perdí la integridad de mis hermosos meniscos.

— Dra. Anna Szabo

Como siempre sostengo, a veces la vida nos trae un problema no solo para que aprendamos a resolverlo, sino para que tal vez podamos ayudar a otros a prevenirlo compartiendo nuestra experiencia vital.

Esta lesión me llevó a un largo camino de exploración de lo que llamo “auto medicina”:

La AUTOMEDICINA son todos los recursos que tenemos a mano para resolver nuestros problemas físicos y mentales a través de soluciones descubiertas por nosotros mismos, por el sistema de “prueba y error”, sin recurrir a medicamentos tóxicos que tal vez alivian los síntomas pero no los curan.

En los siguientes videos vas a ver unos ejercicios súper simples pero potentes para fortalecer tus rodillas y así evitar posibles dolores. Son PREVENTIVOS de lesiones. En caso de que ya tengas una lesión, es conveniente que los hagas cuando tus rodillas ya no estén en la etapa más aguda del proceso. Si hay INFLAMACIÓN, hay que esperar y hacer reposo.

FE DE ERRATA: En el minuto 3.39 del video 2 de 3, donde digo imanes de grafito debo decir de FERRITO

Cada persona necesita:

 APRENDER A REGISTRAR LAS NECESIDADES DE SU PROPIO CUERPO

Necesitas SENTIR que es lo que le hace bien a tu cuerpo y qué es lo que le hace daño.

¡NO SIGAS PROTOCOLOS NI INSTRUCCIONES DE OTROS SIN SENTIRLAS COMO PROPIAS!

Vas a encontrar innumerables consejos por todas partes. Allí es donde empieza tu investigación personal: prueba y error, prueba y error una y otra vez hasta que encuentres lo que te resulta saludable y cómodo a VOS.

Lo mejor de estos ejercicios que te propongo es que son tan simples que podés hacerlos sin siquiera salir de la cama.

CONCEPTOS BÁSICOS PREVENTIVOS

  • FORTALECER LOS 3 GRUPOS MUSCULARES QUE MANTIENEN LA RODILLA EN UNA POSICIÓN ESTABLE: cara anterior (cuádriceps), cara posterior (isquiotibiales) y cara interna (abeductores).
  • MANTENER RELAJADA LA CARA EXTERNA DEL MUSLO. Allí hay un músculo muy delgado, el tensor de la fascia lata, que muchas veces se contractura, duele y genera dificultad en el movimiento de rodillas.
  • SER CONCIENTES DE LA POSTURA ERGUIDA CORRECTA: la rodilla y la punta del pie deben estar alineadas en la misma dirección en el momento de caminar o trasladarse.
  • EVITAR MOVIMIENTOS NO FISIOLÓGICOS ( laterales) Y BRUSCOS
  • NO FORZAR LOS MOVIMIENTOS FISIOLÓGICOS
  • MASAJEAR LAS PARTES DOLOROSAS APENAS SE SIENTE UNA MÍNIMA MOLESTIA Y DETENER EL EJERCICIO HASTA RECUPERARSE
  • CONCIENTIZAR CONSTANTEMENTE NUESTRA POSTURA y CORREGIRLA hasta lograr que la buena postura sea algo automático y natural.

CONCEPTOS BÁSICOS DE TRATAMIENTO

  • RESPETAR EL DOLOR: no forzar el cuerpo más de lo que el dolor señala. Hacer reposo si hay dolor que aumenta con el movimiento.
  • APLICACIÓN DE CALOR O DE FRÍO: generalmente el calor mejora la mayoría de los dolores de rodilla. Pero a veces en algunos casos de tendinitis lo que mejora la lesión es el frío. El calor es mejor que sea calor seco. El frío conviene aplicarlo masajeando rápidamente la zona dolorida y sus alrededores con un cubito de hielo sin dejarlo nunca apoyado en ningún lado, como si nos estuviéramos enjabonando. Hay que ir probando qué nos hace bien en cada caso y a cada momento (“Lo efectivo es la medida de lo verdadero”).
  • MAGNETOTERAPIA: inicialmente se coloca la cara roja (polo norte o polo negativo) sobre la zona que más duele y la cara negra (polo sur o polo positivo) exactamente en oposición al otro imán. Si al colocarlos de este modo el dolor aumenta, entonces el cuerpo nos está diciendo que necesita que invirtamos los imanes. De este modo, colocaremos la cara negra sobre el dolor y la roja del lado opuesto. Otra forma de usarlos es poniendo dos imanes a los costados de la zona dolorida (no encima) siempre uno negro y otro rojo. Tiempo y frecuencia: no hay patrón fijo. Hay que experimentar lo que es bueno para cada circunstancia y escuchar las señales: por ejemplo si el dolor desaparece, sacar los imanes. O, si mejoró y luego empeoró puede significar que los tuvimos demasiado tiempo. A veces 15 minutos bastan y en algunos casos se puede dormir toda la noche con los imanes puestos.
  • AUTOMASAJE: hacerlo en forma suave y circular, respetando el dolor. Se pueden usar cremas o aceites que contengan Árnica montana, Romero y Enebro. Masajear no solo la rodilla sino todos los músculos que la sostienen en sus 4 caras.
  • GOLPECITOS DE ACTIVACIÓN: acompañan al masaje. Masajear, golpear suavemente y volver a masajear, una y otra vez. Los golpecitos dados con la palma de la mano en zonas óseas o con el puño cerrado si es una zona blanda activan la contracción muscular y luego su relajación mejorando el resultado del automasaje.
  • EJERCICIOS SUAVES Y PROGRESIVOS: forzar el movimiento cuando hay una lesión solo logrará demorar su curación. Los ejercicios tienen que ser de 2 tipos: de fortalecimiento muscular (ver video 1) y de elongación progresiva de cada grupo muscular.
  • HOMEOPATÍA: hay muchos remedios homeopáticos que ayudan a curar las lesiones de rodilla. Cada uno tiene características particulares de acuerdo a la causa de la lesión, la localización exacta, el tipo de dolor y las condiciones particulares. Es bueno que consulten a su Homeópata para que les indique el remedio más aconsejable en cada caso. Entre los remedios más usados están: Arnica montana, Bryonia alba, Apis mellifica, Rhus toxicodendron, Ledum Palustre, Ruta graveolans, etcétera.